– La Conferencia Episcopal propone un documento abierto a católicos y ciudadanía para reflexionar sobre la persona, la familia y la sociedad desde la perspectiva del bien común y la fe

MADRID, 13 (SERVIMEDIA)

Los obispos españoles señalaron este viernes que «hoy en día, desde el punto de vista científico, se puede decir que lo que existe en el seno de una mujer embarazada es una vida diferente y que hablar de derecho al propio cuerpo no responde a una propuesta racional».

Así lo señaló el arzobispo de Valladolid, Luis Argüello, en la presentación en la sede de la Conferencia Episcopal Española (CEE) en Madrid de un documento de trabajo «para la Iglesia y la sociedad» con el que los prelados instan a católicos y a los distintos agentes sociales a dialogar y reflexionar sobre la persona, la familia y la sociedad desde la fe en Dios y la perspectiva del bien común.

El prelado lamentó que la normativa del aborto haya eliminado el tiempo de reflexión de la mujer para abortar y consideró «importante» que esa decisión «esté informada». «Un estado que quiera regular una situación, incluso la llama ‘derecho’, no puede suprimir para el ejercicio de ese ‘derecho’ toda la información posible y la vías de salida, de vivienda, económicas y reglas del juego laborales que favorezcan la vida», indicó, en referencia a que la legislación, inspirada por los grandes organismos internacionales, se dirige a una propuesta antropológica para que desaparezcan «trabas» y donde prime el «individualismo y el elogio de la autodeterminación».

Estas declaraciones se producen después de que el Gobierno de Castilla y León proponga que las mujeres que vayan a abortar escuchen el latido del feto y lo vean en una ecografía, decisión que ha suscitado gran polémica entre los sectores feministas y políticos de izquierda.

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VOTO RESPONSABLE

El documento ‘El Dios fiel mantiene su alianza’, que se aprobó en la Asamblea Plenaria de noviembre de 2022, se basa en meses de trabajo y aportaciones de diversos colectivos sociales, religiosos y universitarios y busca ser una reflexión compartida para estimular la reflexión y el diálogo, también en el marco de las futuras citas electorales para ejercer un voto «responsable».

De hecho, Argüello señaló que el texto trata de «animar la presencia pública de los católicos» en los ambientes e instituciones de los que forman parte y ayudar a abrir un proceso de diálogo y discernimiento en diversos ambientes e instituciones (comunidades cristianas, Acción Católica, consejo de estudios y proyectos, universidades católicas, semanas sociales, medios de comunicación social, etc.), así como en otros grupos sociales que quieran unirse a esta reflexión.

«No se trata, por tanto, de un nuevo documento doctrinal o pastoral», subrayó sino de una invitación a la reflexión por parte de todos, en un momento de convergencia de múltiples acontecimientos, políticos, económicos y culturales expresión de una gran transformación que afecta a la trasmisión de la fe y a la convivencia en nuestra sociedad.

En concreto, se refirió al ‘cambio de época’ del que suele hablar el Papa, las culturas ‘woke’ y de la cancelación, la relectura de la memoria histórica y otros acontecimientos como la pandemia, la erupción del volcán de La Palma y la guerra en Ucrania.

Por ello, los obispos llaman a reflexionar sobre cuestiones como el trabajo, especialmente el de los jóvenes, el matrimonio abierto a la vida, la salud mental, la migración o las nacionalidades