MADRID, 29 (SERVIMEDIA)

El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, pidió este jueves «apoyo institucional, facilidades y herramientas» para que las empresas tecnológicas puedan adaptarse a las transformaciones que trae consigo el cambio climático y la responsabilidad social «de la mejor manera» para todos.

El presidente de la patronal se expresó en estos términos durante el encuentro ‘DigitalES Summit’, del que dijo que «se ha convertido en un referente para el sector». A su juicio, el papel de las empresas del sector tecnológico durante la pandemia de covid-19 fue «clave para el mantenimiento de nuestra economía y del empleo».

En este contexto, señaló que «ahora existen nuevos retos para el sector tecnológico, como la guerra en Ucrania, que ha afectado a la cadena de suministro y ha planteado grandes desafíos en materia de geopolítica, de seguridad nacional, de ciberseguridad». Y, ante este panorama, Garamendi defendió que «es importante preguntarnos cómo estamos sorteando los líderes de las empresas estas presiones globales externas y la incertidumbre económica».

Además, explicó que las empresas tecnológicas se enfrentan a nuevos desafíos normativos relacionados también con el cambio climático y la responsabilidad social. «La adaptación a estas nuevas normativas no es una opción, es una necesidad para mantener la sostenibilidad del sector», añadió Garamendi, quien pidió apoyo institucional para que las empresas puedan adaptarse a las transformaciones.

En su intervención en vídeo, el presidente de los empresarios españoles dijo que «falta muchísima gente», en alusión a las dificultades que existe para cubrir algunas vacantes, incluidos sectores como el tecnológico.

Al hilo, sostuvo que faltan 25.000 técnicos en ciberseguridad, pese a que «talento existe», por lo que comentó que «hay que buscarlo».

Quizás también te interese:  Las 10 mejores aplicaciones de entrega de alimentos a domicilio para ordenar en línea

Finalmente, manifestó que se debe trabajar en mayor medida para contribuir a que las mujeres accedan a las carreras tecnológicas y científicas, pues solo un 25% de los matriculados son chicas y, de éstas, la mitad va a Medicina.